Alejandro Armenta logró la coordinación de Defensa de la Cuarta Transformación en el estado de Puebla, y este acontecimiento ha sido tomado por muchos actores y medios de comunicación como si hubiera ganado ya la gubernatura, toda vez que Morena lidera las preferencias electorales.
Lo anterior no hubiera sido posible, sin por lo menos 3 tiempos. El primero va de 2017-2019, pues en 2017 se integra a Morena y empieza a construir un liderazgo estatal que le permite buscar un espacio en el Senado de la República en 2018.
En 2019, luego del fraude electoral y de la falta absoluta de la gobernadora Martha Ericka Alonso, el senador Armenta buscó la candidatura de Morena para la gubernatura de Puebla, aun cuando Miguel Barbosa también se inscribió. Esta es sin duda una etapa fundamental, pues el senador logra articular el antibarbosismo y acrecentar su nivel de conocimiento en el estado, sin embargo, el costo político fue la animadversión de Miguel Barbosa y su burocracia.
La confrontación con el gobernador Barbosa se extenderá de 2019 hasta 2022, segundo momento en el que continuará afianzando su liderazgo, sobre todo con heridos de guerra del Barbosismo, y también con cuadros de militantes históricos de la izquierda poblana y fundadores de Morena. En contraste, el barbosismo nunca pudo crear un liderazgo que pudiera garantizar continuidad y sus cuadros quedaron muy por debajo de considerarse competitivos.
Su lugar de villano fue tomado por Ignacio Mier, pues una vez que éste asumió la Junta de Coordinación Política de la Cámara de diputados y planteó sin ninguna cortesía para Barbosa, buscar la gubernatura de Puebla, Armenta empezó a conciliar, vía Julio Huerta, con los intereses del gobernador, redujo su potencial riesgo para diversos actores y a partir de 2022 y hasta el 10 de noviembre de 2023 se dedicó a construir la unidad del movimiento entorno a su persona. La muerte de Barbosa fue un escenario que recompuso las fuerzas políticas, sin embargo, el senador salió avante.
Este último momento no fue sencillo, en una cerrada votación logró la presidencia de la Mesa Directiva del Senado de la República, equilibrar el ritmo de exceso de publicidad de Ignacio Mier e, incluso, romper el cerco mediático que logró imponer el equipo del diputado federal, con notas y columnas nacionales. El senador salió ileso de la guerra sucia, y aun en el peor momento (el Audi del Bienestar) hizo una jugada maestra al enrocar a el “Choco” con Pavel Gaspar Lima, heredero de una larga tradición de izquierda (comunista).
Pavel incorporó por cada impresentable de Nacho Mier a 10 miembros fundadores con solvencia moral y liderazgo en el territorio, en lugar de grupos ecocidas, a organizaciones de campesinos, mujeres, estudiantes y profesionistas, equilibraron el aire y nunca abandonaron el territorio.
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Los diarios por mucho tiempo fueron parte fundamental en la construcción de la opinión pública, ahora también lo son las redes sociales, y las opiniones escritas cada vez son menores en cantidad y calidad. Sin embargo, en El Sol de Puebla hay un esfuerzo editorial por construir un mejor debate, informado, verídico y eficaz. Gracias por la oportunidad querido Jorge Rodríguez.
@IsaacPalestinaD