De acuerdo con la Procuraduría Federal de Consumidor (PROFECO), no existen alimentos buenos o malos, solo hábitos que pueden perjudicar la salud, por lo que la mejor idea es optar por opciones que se adapten a nuestro consumo y dieta diaria.
El pan es un alimento presente en la mayoría de nuestras dietas, hasta el punto de que muchos tenemos uno especifico que determinamos como favorito y elegimos sobre todas las demás opciones, aunque puede no ser el alimento más sano si hay que tomar en cuenta que unos pueden ser más dañinos que otros.
¿Qué pan es bueno para la salud?
El pan, al menos el dulce, contiene grandes cantidades de azúcar para brindarle su característico sabor, este además de diabetes puede provocar afectaciones en el microbioma pues alimenta las bacterias negativas y ayuda a la inflamación del cuerpo.
Además, que otro factor que influye son las calorías, estas provocan un aumento de peso y de igual forma aumentan el riesgo de padecer diabetes. Algunos de los que contienen menos de este elemento son el cuernito y el cocol, ambos tampoco contienen altos grados de azúcar.
Por otro lado, si lo que deseas es consumir pan salado para acompañar tus comidas o simplemente para darte un gusto también hay opciones; de acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), se recomienda que la ingesta de pan sea de 250 gramos al día.
En esta clasificación, se considera que el pan integral es el que tiene más beneficios para el cuerpo, aporta fibra, proteínas, vitaminas de tipo B y E, potasio, folato, hierro y magnesio, además que no causa aumentos en el azúcar en sangre como sus contrincantes.
¿Qué hace el pan en el cuerpo?
El pan como otros alimentos, ayuda a equilibrar los elementos de nuestro cuerpo, así como también contribuye a cubrir las necesidades que nuestro cuerpo como son la energía y los elementos esenciales para que todo funcione a la perfección.
De manera general, esta comida puede aportar vitaminas del grupo B como B1, B2, Niacina, vitamina B6 y ácido fólico; minerales como fósforo, magnesio, calcio y potasio; además de contener proteínas.
