“Hace 50 años, el Colegio de México (Colmex), a través de su Centro de Estudios Lingüísticos y Literarios, dio inicio al proyecto de conformación del Diccionario del español de México (DEM), bajo la dirección del lingüista e investigador Luis Fernando de Lara. Tras dos ediciones, ampliaciones y adaptaciones tecnológicas, este compendio tiene más de 34 mil palabras, en uso desde 1921 a hasta nuestros días.
“Este es primer diccionario que se hizo con una investigación en los hechos lingüísticos. No se trató de un conjunto de escritores, ni señores notables que decidieron qué palabras debían incluirse, sino que se comenzó a hacer con estudios objetivos, recabando información, que puede provenir de grabaciones o de escritos de distinta índole”, explica el lexicógrafo Francisco Segovia del equipo de especialistas del DEM, a El Sol de México.
El especialista relata que el diccionario fue iniciativa del antiguo director del Fondo de Cultura Económica, Antonio Carrillo Flores, para hacer un “Webster mexicano”, es decir, un diccionario que reflejara el habla y cultura local, del mismo modo en que se solía usar en la tradición de los diccionarios Noah Webster, por la cual Estados Unidos tenía un diccionario que lo diferenciaba de los del Reino Unido.
En este sentido, Segovia afirma que un diccionario es “una herramienta poderosa”, pues “otorga prestigio a las lenguas” como ha sucedido con algunas lenguas originarias que ahora cuentan con sus propios diccionarios monolingües, en los que el Colmex ha participado, además de tener gran utilidad ante dudas específicas de significado y uso de palabras.
“No es que el español de México corra peligro de desaparición como sí lo hacen las lenguas indígenas, sin embargo, un diccionario así es también una defensa de la norma lingüística de nuestro país, con la que se hace frente a la norma lingüística de la Academia Española.
“Estábamos acostumbrados a corregirnos en algunos modos del lenguaje, porque nos regíamos bajo lo que dictaba la Real Academia Española, pero ahora reconocemos que los países de Latinoamérica tenemos un español diferente al de España. Afortunadamente, el diccionario de la Real Academia Española hace su trabajo mejor que antes”, asegura Segovia, quien especifica que el DEM es un diccionario descriptivo, pues “trata de reflejar el español como efectivamente se usa”, tanto en su registro más culto, como meramente popular.
CAMBIOS EN VOCABULARIOS Y MÉTODOS
Segovia explica que el corpus de este diccionario es “sincrónico”, por lo que “refleja el español que se habla y se habló”. Por esta razón es que no refleja exactamente las palabras que van o han caído en desuso, aunque el Centro de Estudios Lingüísticos y Literarios tiene conteos de estos.
Sobre los posibles cambios lingüísticos que han podido registrar, el especialista aclara que hay dos corpus en la historia de este diccionario, los cuales se complementan: el primero, de 1921 a 1973 y el otro que abarca hasta su última actualización en 2022, en que se agregaron 341 palabras, entre ellas covid, wannabe, after, levantón y webcam.
“En la medida que vayamos analizando los dos corpus determinaremos los cambios, pero es indudable que el vocabulario de las computadoras ha crecido inmensamente”, explica el lexicógrafo.
En la recopilación de datos se realizan no sólo revisión de textos de toda índole, sino grabaciones de campo y encontradas en contenidos digitales como videos y podcast, en específico de regiones de difícil acceso.
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“Hemos ido mejorando, nosotros fuimos el primer diccionario en español en hacer su corpus con el uso de computadoras que hacen cálculos de constancia de palabras; fuimos innovadores al crear el primer analizador gramatical automático del español, realizado por la lingüista María Isabel García Hidalgo”, afirma Segovia, quien asegura que México con este diccionario ha servido de modelo para otros como el de Argentina, y hasta cierto punto el de la Real Academia Española, a la cual nuestro país se adelantó por casi 26 años.
Actualmente este diccionario se puede consultar de forma digital, a través de la página https://dem.colmex.mx/. El año pasado alcanzó casi once millones de consultas, tanto de México como, prácticamente del todo el globo, aunque principalmente de Estados Unidos.