Tras desacuerdo con Netflix, ¡Que viva México!, de Luis Estrada, llega a cines – El Sol de Puebla

“¿Sería usted capaz de interpretar a los Tres Huastecos?”. Esa fue la pregunta que recibió Damián Alcázar de Luis Estrada. “¿Qué locura se le estará ocurriendo?”, pensó el actor. Ambos son viejos amigos. De cine y de vida. Ambos, uno como actor y otro como director, han sido los protagonistas de películas que satirizan la crisis política y social de México, como La Ley de Herodes (1999), Un mundo maravilloso (2006), El Infierno (2010) y La dictadura perfecta (2014).

El reto le llamó la atención a Damián Alcázar y por eso aceptó participar en ¡Que viva México! (2022), una película que retrata a la sociedad mexicana en casi todas sus aristas, desde la ambición y la corrupción hasta la ingenuidad y la mala suerte. Es, de algún modo, la radiografía del “pueblo bueno”, como dice uno de los personajes de la película. Y sí, hay un cameo donde aparece López Obrador.

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Alcázar, sin embargo, ya no es el actor encolerizado con la clase política mexicana. No al menos con la que hoy se encuentra en Palacio Nacional. De hecho, no escatima en afirmar que Andrés Manuel López Obrador es el mejor presidente que ha tenido el país.

“Yo creo que está intentándolo, sigue barriendo la casa, limpiando el muladar que dejaron y al que todos, o la gran mayoría, quiere regresar”, asegura en entrevista con Organización Editorial Mexicana (OEM) el actor de 70 años. “No hemos tenido un presidente tan inteligente, tan conocedor de la historia, tan claro, tan honesto y tan luchador. Todos los días trabaja de sol a sol y eso no lo hacía ninguno”.

EL OBSTÁCULO

La sátira política sobre la Cuarta Transformación causó polémica antes de estrenarse, no por su contenido, sino por el desacuerdo entre el director y la plataforma de streaming Netflix, que pretendía hacer un debut modesto en salas de cine.

Todo estaba listo para que la quinta colaboración de la dupla Estrada-Alcázar se estrenara el 16 de noviembre de 2022, pero la empresa decidió vender los derechos de distribución a Estrada.

La controversia se hizo más grande en ese momento, por la diferencia con que Netflix abordó la publicidad y distribución de Bardo. Falsa crónica de unas cuantas verdades de Alejandro González Iñárritu, con posters por toda la Ciudad y su estreno en salas comerciales y el circuito cultural.

Tres meses después, Sony Pictures International Productions anuncia la llegada a salas de cine de todo el país de ¡Que viva México! en más de tres mil pantallas el 23 de marzo, una cinta que de acuerdo con Luis Estrada “es una ácida fábula social y una venenosa sátira política; grotesca con mucho humor negro que, como un espejo sin alma, nos muestra y retrata a todos en estos tiempos de polarización e intolerancia, pero no en un tono realista o naturalista, sino con la distorsión que dan la parodia, la farsa, el realismo mágico y la caricatura”.

En el comunicado de prensa, Estrada añade que la historia está enmarcada “en ese pequeño infierno personal al que todos pertenecemos y que todos, para bien o para mal, tenemos y padecemos: La familia.”

LA PELÍCULA QUE DESNUDA A PUEBLO BUENO


¡Qué viva México! (2022) fue filmada en Real de Catorce y tiene un elenco integrado por actores como Alfonso Herrera, Ana de la Reguera, Joaquín Cosío y Ana Martín. Dura poco más de tres horas y toda la historia gira en torno a un pueblo llamado La Prosperidad, que de próspero tiene muy poco.

Nuevamente, Luis Estrada juega con la sátira para desnudar realidades complejas. Al estilo de la vieja película protagonizada por Pedro Infante, Damián Alcázar interpreta a tres personajes: un cura, un alcalde y un padre de familia. Los tres encarnan distintas caras deleznables del pueblo. “Su guión es muy inteligente. Su humor es extraordinario. El mayor desafío era hacer tres personajes. Qué locura. Formidable. Había que hacerla”, dice el actor.

Aunque en la cinta hay algunas referencias críticas a la actual administración obradorista, el actor Damián Alcázar se mantiene fiel a sus ideales, muy cercanos al proyecto encabezado por López Obrador. Sin embargo, reconoce que no es morenista. Admite que desconfía un poco del movimiento como partido político. Prefiere los movimientos “de vocación social”. Su preocupación: 2024. “Toco madera”, dice cuando menciona la posibilidad de que la derecha vuelva al poder.

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El actor está consciente de que la militarización del país es un tema debatible. Para él, todo depende del enfoque con el que se mire. “La militarización depende también de cómo se usaba antes al ejército y cómo se usa ahora”, apunta. De hecho, su opinión sobre las fuerzas armadas es positiva. “El ejército es un grupo enorme de hombres que perciben su salario y que están trabajando a favor de la sociedad”, afirma.

Hace ya más de 10 años que Damián Alcázar protagonizó El Infierno (2010), una película que relató con humor negro la crudeza y la barbarie de la guerra contra el narcotráfico. ¿Ha cambiado algo desde entonces hasta ahora? El actor responde: “Sigue cambiando. Cualquier jueves en la mañanera te das cuenta cuántas personas en una semana fueron detenidas, cuántas toneladas de droga, cuántas armas… Hay una constante, se está consiguiendo incluso frenar los crímenes dolosos, los feminicidios, porque es un muladar el que está intentando limpiar. Todo esto que ocurre, lo que pasó en la Tierra Caliente de Guerrero, son cosas orquestadas, está perfectamente calculado. Yo creo que vamos muy bien”.

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