Venezolana busca una nueva vida en Puebla enamorando los paladares – El Sol de Puebla

Por temas de riesgo, Elba dejó el país que tanto amaba y en donde nació: Venezuela. Tomó la decisión más difícil de su vida al refugiarse en México y hoy, es una emprendedora que logró reubicarse en Puebla.

Para Elba, cocinar es una muestra de amor y por ello, creó “frasquitos de felicidad”, un negocio de mermeladas y otras delicias gourmet con las que se ha ganado el paladar y el corazón de sus clientes poblanos.

La anterior historia la compartió el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur) desde su oficina en el estado de Puebla, pues este grupo tiene como uno de sus objetivos reubicar a personas refugiadas que han recibido asilo o están en proceso de recibirlo por parte del Gobierno de México.

“¿Has probado los frasquitos de felicidad de Elba?. Elba es una refugiada venezolana que deleita paladares en México. Su negocio de mermeladas y delicias gourmet cuida a las personas por dentro y por fuera”, es parte de la historia de Elba y que Acnur considera como un caso de éxito.

Para Elba, cuando alguien le hace comida a otra persona le está dando parte de su corazón, es un momento amoroso de entrega y por tal motivo, cuando tuvo la ayuda de establecerse en Puebla participó con su hermana en un programa de mujeres emprendedoras. Dicho programa fue desarrollado por Acnur y el Gobierno de Puebla, puntualmente por la Secretaría del Trabajo.

“Esto ha sido una evolución absoluta, porque nosotras estábamos haciendo todo manual. Ahorita por supuesto el hecho de tener estos equipos también los productos han mejorado en calidad (…) entonces ya es otra sensación y de otra textura”, compartió Elba luego de que fue ganadora de este programa y recibió apoyo para mejorar sus herramientas de trabajo.

Acnur dio a conocer que gracias también a este programa, Elba pudo crear “Cayena Pepper”, que es un negocio familiar que produce conservas con ingredientes orgánicos, los cuales son cosechados por productores locales. Lo que ha fortalecido aún más el vínculo con su comunidad acogida.

Acnur entrevistó a las personas que se han vuelto clientes de Elba por su producto y todos coincidieron que esta fue una gran oportunidad para los refugiados, ya que ellos dejaron toda su vida en su país y con este tipo de emprendimientos pueden crear un nuevo rumbo en este país.

“Les da una oportunidad de insertarse en la sociedad que a veces es complicado como extranjero y más como refugiado”, dijo una de las personas que compra continuamente a Elba sus productos.

Para concluir, Elba declaró a Acnur que sueña con poder consolidar y ampliar su emprendimiento para seguir trabajando en el país que le abrió las puertas: México.

Enlace a la fuente

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *