Con el paso de los años las recetas de medicina tradicional han permanecido en el consiente colectivo y los tés e infusiones forman gran parte de estos métodos de sanación, es por eso que se busca preservar el legado y dar a conocer las recetas para evitar que se pierdan.
El epazote es una famosa hierba usada en la cocina, principalmente en el centro, sur y suroeste del país, por lo que es común encontrarla en distintas presentaciones como fresca, seca o en polvo, cual sea su presentación, su consumo proporciona grandes benéficos al cuerpo.
¿Para qué sirve la infusión de epazote?
De acuerdo con información del Instituto Nacional de Investigaciones Forestales, Agrícolas y Pecuarias, esta hierba puede tener beneficios como el de estimular el flujo de la sangre, evitando así problemas de circulación.
Aunque sus benéficos no terminan ahí, pues también es usado para disminuir los cólicos menstruales, el dolor de estomago e intestinos, ayuda en la eliminación de parásitos, es aliado para calmar el nerviosismo excesivo, descongestiona las vías respiratorias y se cree, aumenta la producción de leche materna.
Aunque sus beneficios son amplios, se recomida se consuma con moderación, pues en sus componentes se encuentra el ascaridol, un aceite que si se consume en exceso tiende a ser toxico por lo que se debe consumir con precaución y en pequeñas cantidades.
Para malestares estomacales o cólicos, se recomiendo solo consumir media taza una sola vez y para los parásitos es media taza en ayunas durante tres días, recuerda esperar una hora para luego desayunar.
¿Cómo hace infusión de epazote?
Preparar este remedio casero es una tarea fácil y como ingredientes solo requieres 8 hojas frescas de epazote y 50 mililitros de agua potable; el primer paso será hervir el agua, posteriormente luego que rompa el punto de ebullición añade el ingrediente especial.
Una vez que las añadidas bajan el fuego y déjalo por tres minutos; pasado este tiempo retirarlo de la estufa y déjalo reposar por tres minutos más. Ya templado pásala por un colador y ahora si está lista para que la puedas tomar.
Si su sabor no te parece lo más atractivo puedes probar, intenta añadiendo un poco de miel de abeja o de agave o de igual forma puedes poner unas cuantas gotas limón para cambiar el sabor sin perder sus beneficios.