Roberto Zataraín Leal y José Antonio Gali López son dos viejos amigos y camaradas, para hablar en lenguaje de la 4T, que han sellado una nueva alianza para apoyarse como candidatos en la elección que se avecina, uno, el primero, como abanderado a diputado local por el distrito 10, y otro, el segundo, como aspirante a legislador federal por el distrito 9.
Zataraín y Gali tienen una relación que nació mucho antes de que el papá del segundo fuese presidente municipal de Puebla y luego mini gobernador en la era política del morenovallismo, y ahora han vuelto a reencontrarse en tiempos de Morena y la 4T, los dos como tiradores a un puesto de representación popular.
El punto de coincidencia tiene que ver con el territorio por el que pretenden competir, ya que el distrito local 10 y el distrito federal 9 comparten una amplia lista de colonias ubicadas en la zona norte de la ciudad.
Esa comunión de demarcaciones ha hecho que los dos personajes hayan planeado hacer campaña juntos, para mostrarse como integrantes de una nueva generación y perfiles políticos, sí, ligados a la 4T, pero diferentes al resto.
Si bien ya no son unos jovencitos, sí podrían conectar con los electores de menos edad gracias a sus características personales, entre ellas el contenido de su mensaje.
Al día de hoy los dos participan en su respectivo proceso interno, aunque se sabe que Gali López tiene apalabrada la candidatura gracias a la asignación de cuotas en favor del Verde, partido que lo impulsa y que va en coalición con Morena.
Zataraín, en cambio, con todo y que es pareja sentimental de Claudia Rivera Vivanco, carece de ese tipo de seguridad y está obligado a ganar la postulación en la calle, como gustan de decir en Morena, con el pueblo.
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Héctor Alberto Sánchez Morales mandó un mensaje a los empresarios en el contexto del proceso electoral que ya se encuentra en marcha.
El presidente del Consejo Coordinador Empresarial pidió a sus agremiados que no se distraigan en temas políticos y que se dediquen a lo que están haciendo justo en estos momentos, que es velar por el crecimiento del sector económico para continuar en la ruta del crecimiento.
“El mensaje para nuestro sector es que siga trabajando como debe ser y que no se distraiga en la parte electoral. Hay mucho camino por recorrer antes de entrar a toda la efervescencia política”, expuso.
Lo interesante es que no cerró la puerta a la vinculación política del CCE con los protagonistas de la elección, sino que pidió tiempo para esperar a que haya candidatos y, una vez que estos queden formalmente identificados, entonces sí procederá a los acercamientos de rigor.
Sánchez Morales adelantó que el organismo sostendrá encuentros con los candidatos para mostrarles sus propuestas, sus necesidades, en materia, principalmente, de seguridad, nuevas inversiones y agua potable, pero más adelante.
En pocas palabras, en este océano de aspirantes, el líder empresarial sugirió a sus colegas no enredarse con cualquiera antes de tiempo, para no perder tiempo (ni recursos) con aquellos que ni siquiera llegarán a la boleta electoral.
Hace bien.
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Parece que la unidad y suma de esfuerzos promovida por el senador Alejandro Armenta Mier, como virtual candidato a gobernador de Morena, no se quedará en el discurso, sino que se concretará en la realidad.
En su habitual conferencia de prensa de los lunes el aspirante morenista dio a conocer la incorporación de Luis Antonio Godina Herrera y Francisco Ramos Montaño a su equipo de colaboradores.
La nota tiene que ver con el pasado inmediato de estos dos personajes.
Godina y Ramos fueron piezas clave en el war room de Ignacio Mier Velazco, uno como estratega de políticas públicas y el otro como operador político de tierra.
La presentación incluyó además a Lauro Sánchez, integrante del equipo de activistas de Olivia Salomón Vibaldo, otra de las rivales de Armenta en el pasado reciente.
